La Santa Cueva y la Virgen de la Moreneta
Una vez más, las luces extrañas son las protagonistas de la leyenda que envuelve a la Virgen de Montserrat.
Fueron unos niños pastores, sobre el año 880, los que observaron durante varios Sábados unas luces que señalaban siempre hacia un mismo lugar. Atraídos por los destellos a medida que se acercaban al lugar podían oír música celestial proveniente de las alturas.
Los niños ponen en conocimiento del rector de Olesa de Montserrat los hechos y este acude al lugar acompañado por numerosas personas atraídas por la noticia.
Tras el testimonio del rector de Olesa, el obispo de Manresa se persona en el lugar señalado por las luces y encuentra en un hueco de la roca morena a la virgen ataviada con sencillas vestiduras.
El hecho insólito se produce cuando el obispo de Manresa ordena el traslado de la virgen a su ciudad. A medida que alejan la figura del lugar esta va adquiriendo más peso, como si no quisiera moverse de allí. El Obispo ante lo ocurrido mandó construir una capilla en el lugar, que se ha convertido en centro de peregrinación.

Al parecer la imagen fue tallada para ser llevada a Roma, pero durante el trayecto fue escondida en la montaña para evitar que los musulmanes la robaran.
MMB